Jared Leto tiene un Oscar en su haber, un gran currículum como intérprete (y para muchos, igualmente como cantante), pero también conserva su fama de estrella problemática. Sus métodos son un tanto “extremos” -¿hace falta recordar las locuras que hizo en el set de “Escuadrón Suicida” para ‘entrar en personaje’?-, pero su egocentrismo va un poco más allá.

Mary Harron, directora de “Psicópata Americano” (American Psycho, 2000), todavía recuerda que las exigencias del actor superaban con creces a las de su protagonista, Christian Bale, una conducta que no le ganó demasiados adeptos durante aquella filmación. Los años pasaron, pero las mañas de Jared siguen en muy buena forma, hasta se intensificaron cuando descubrió que SU Joker no sería el centro de atención de la película de Todd Phillips, y que sería reemplazado por la nueva versión de Joaquin Phoenix.     

Ahora, en medio del suceso de “Guasón” (Joker, 2019) -cada día más cerca de alcanzar los 300 millones en la taquilla norteamericana-, salen nuevos detalles a la luz de cómo el actor trató de impedir el avance de la producción cuando todavía estaba en sus primeras etapas de desarrollo. Así es, según trascendió, Leto se sintió “enajenado y molesto” ante la ‘usurpación de personaje’, y además de quejarse con sus agentes de CAA (Creative Artists Agency) -los cuales también representan al director-, también le pidió a su manager musical de entonces (Irving Azoff) que interfiriera ante los ejecutivos de Warner Bros. para ‘matar’ la película de Phillips.

Claro que los allegados del actor negaron dicha solicitud y Azoff rechazó hacer comentarios (manager y artista ya no trabajan juntos), pero el prontuario de Leto es bien conocido y a nadie le sorprendería que dichas acciones (exageradas o no) fueran verdad.  

Los planes cinematográficos de WB cambiaron drásticamente desde el estreno de “Escuadrón Suicida” (Suicide Squad, 2016) y la concepción del fallido DCEU, y por el camino quedaron varios proyectos que involucraban el regreso a la pantalla del payaso del crimen interpretado por Jared. Estas promesas incumplidas se sumaron al disgusto del actor, que esperaba, entre otras cosas, su propia historia en solitario. En cambio, el estudio prefirió darle el visto bueno a la oscura propuesta de Phillips con un presupuesto un tanto ajustado, un poco (también) con la esperanza de que la falta de dinero disuadiera al realizador de echarse para atrás con la producción. Sabemos que eso no ocurrió y ahora “Guasón” va camino a convertirse en una de las películas más taquilleras del año, dejando a todos bastante contentos, ¿no?

Volviendo a Leto y la encarnación de un villano que no cayó nada bien entre los productores, los fans y el propio director, David Ayer (que decidió eliminar varias de sus escenas del corte final), su comportamiento y la mala relación con sus representantes, también lo terminaron alejando de CAA, agencia que abandonó el pasado invierno, favoreciendo los servicios de WME. Según allegados al actor, sus managers no hicieron lo suficiente para abogar por los intereses de su cliente, ya que deberían haber luchado un poco más por su versión del personaje y hecho lo posible para detener el proyecto rival.

Si bien, las futuras películas de DC no contemplan la vuelta de Leto -ni “Birds of Prey: And the Fantabulous Emancipation of One Harley Quinn” (2020), ni “The Batman” (2021), ni “The Suicide Squad” (2021) lo tienen como parte de su elenco- y es poco probable que volvamos a ver su encarnación del personaje, su relación con el estudio no se vio dañada en absoluto, ya que en estos momentos se encuentra filmando “Little Things” de John Lee Hancock, junto a Rami Malek y Denzel Washington. ¿Ya se le habrá pasado el enojo?