La carne roja es una de las comidas más elegidas por todos los argentinos. Incluso, es la materia prima de uno de los platos más tradicionales y nacionalista: el asado. 

Sin embargo, se registró en varias ocasiones que el alimento puede ser un peligro para la salud, a causa de lo que causa en el organismo del ser humano. 

Además, junto a los riesgos alimenticios, también cumple un papel clave en los trasplantes de órganos de animales a las personas. De hecho, es uno de los factores que determinan si van a ser rechazados o no. 

Sin embargo, un grupo de investigadores de la University of Nevada, Reno, analizaron el gen llamado CMAH, que permite la síntesis de un azúcar llamado Neu5Gc, el cual se puede encontrar en carnes rojas, algunos pescados y en los productos lácteos.

De esta manera, cuando los humanos consumimos productos derivados de animales que lo tienen, el cuerpo sufre una reacción inmune al azúcar, que es una substancia extraña para nuestro cuerpo, lo que puede producir inflamación, artritis o cáncer.

Luego de las investigaciones, los científicos determinaron que el gen se inactivó. Para ello, analizaron a un total de 322 animales. En el estudio, además, buscaron determinar en qué momentos de la historia detuvo su desarrollo, y tratar de entender por qué se producen ciertas enfermedades para evitar que se extiendan.

"El caviar, una de las comidas más caras del mundo, también es uno de los productos con mayores concentraciones del problema", declaró Sateesh Peri, integrante del laboratorio de Álvarez-Ponce. Pero no todo está perdido: la investigación revela que existe una gran multitud de peces que no tienen el gen.

Al igual que los humanos, las aves tampoco tienen este problema, por lo que consumir pollo, pavo o pato no tiene los efectos negativos que tiene consumir carne roja.