Este sábado fue un día muy especial para el League of Legends latinoamericano, ya que se jugó la última edición de la Liga Latinoamérica, el torneo más importante de la región. El certamen dejará de existir y tendrá un nuevo formato, por lo que la final, a la que llegaron R7 e Infinity, tenía un condimento especial. Son los dos equipos más grandes del norte de la región, y en una épica definición, R7 se consagró campeón invicto y levantó el cuarto trofeo de su historia, con los argentinos Lorenzo "CEO" Tevez, como tirador, y Pedro "Lyonz" Peralta, como soporte.
La final se jugó en el marco de la feria Telcel GAMERGY en Ciudad de México, con cerca de 4.000 hinchas presentes. Es una suerte de clásico en el LoL, ya que son equipos que se vienen enfrentando desde 2018. Si bien R7 llegaba como favorito porque estaba invicto en el torneo, la primera partida de la serie mostró el gran nivel que tienen las dos escuadras y se jugó como una verdadera final, en la que no regalaron nada y se definió por detalles. Fue un espectáculo por parte de ambos, aunque el juego quedó del lado del Arcoíris.
La segunda partida tuvo un desarrollo muy distinto y, desde las primeras jugadas, R7 se pudo imponer y dominar con comodidad. Así sumó otro punto y se puso a uno del campeonato. En la tercera, el Infinito hizo un poco más de fuerza pero no fue rival para un Arcoíris que se convirtió en una aplanadora durante este torneo, y ganó con categoría para cerrar la final con un contundente 3 a 0 y consagrarse como el mejor de la región.
R7 está integrado por los surcoreanos Summit (carrilero superior) y Keine (carrilero central), el histórico peruano Oddie (jungla) y los argentinos CEO (tirador) y Lyonz (soporte). Si bien será considerado otro de los grandes equipos de Latam, la temporada aún no terminó para el Arcoíris porque el próximo desafío será Worlds, el Mundial de League of Legends, que se va a jugar en Europa del 25 de septiembre al 2 de noviembre. En este torneo, integrará la fase de Play-In junto a GAM Esports y Viking Esports de Vietnam, PSG Talon y un representante de la región Asia-Pacific que falta definir, además del campeón de Brasil. Será la última chance que tendrá un equipo representando a Latinoamérica de romperla en dicha instancia y hacer historia.