Con el objetivo de ampliar sus límites e ir en búsqueda de nuevos objetivos, Neymar decidió partir hacia Francia para integrarse al poderoso PSG, financiado por los petrodólares. Si bien llegó como la máxima estrella, se topó con un hueso duro de roer, Edinson Cavani.

Acostumbrado a hacerse cargo de todo tras la salida de Zlatan Ibrahvomic, el uruguayo tomó el control de las pelotas paradas y generó el fastidio de su compañero del brasilero, que recibió el apoyo de Dani Alves y desataron una polémica en menos de 10 partidos.

La intervención del dueño del equipo, la cena reconciliadora armada por uno de los integrantes del plantel y la ausencia de Neymar en el encuentro ante Montpellier, le daban un condimento extra al partido en el que golearían a Bayern Munich por 3 a 0. 

Un gol de cada uno, más otro de Dani Alves, no puso en evidencia las problemáticas entre ellos, que igual mantuvieron un cordial saludo en los festejos de ambos, y luego al finalizar el encuentro, se saludaron con la hinchada tomados de las manos.

Un tiro libre cerca del arco teutón generó tensión entre los fanáticos, sin embargo el brasilero decidió darle lugar al "Matador", que sin gloria ni pena, no inquietó al conjunto rival. Con el objetivo de mantener su camino en Champions y conquistarla, se han sacado a un gran rival con fútbol de alto vuelo.

Los fotógrafos no se mostraron para nada lentos a la hora de tomar las mejores fotos de ellos juntos, y lograron demostrar que la relación no llega a ser de todo mala, aunque no resulta ser como en los primeros cotejos. ¿Se terminaron las discusiones?